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Informe Político Tercera Asamblea Nacional del MINH

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minhPresentamos este Informe Político ante la Tercera Asamblea Nacional del MINH, en el que ofrecemos algunas consideraciones so­bre el trabajo realizado por nuestra organización durante los pasados tres años, sobre la situación nacional e internacional y sobre las pers­pectivas de nuestra labor patriótica en los próximos años.

 

1. Introducción

Presentamos este Informe Político ante la Tercera Asamblea Nacional del MINH, en el que ofrecemos algunas consideraciones so­bre el trabajo realizado por nuestra organización durante los pasados tres años, sobre la situación nacional e internacional y sobre las pers­pectivas de nuestra labor patriótica en los próximos años.

Este documento es el resultado del esfuerzo colectivo de nues­tra Dirección Nacional y ha sido sometido a la consideración de nuestra matrícula en todo el País.

El contenido de este Informe Político se ha enriquecido signifi­cativamente con las sugerencias, análisis y conclusiones resultantes del exitoso seminario Luchas sociales, soberanía e independencia: hacia la descolonización y la liberación nacional, que precedió a esta Asamblea, en el que participaron decenas de compatriotas miembros y no miem­bros del MINH, que ofrecieron aportaciones muy valiosas.

Corresponde asimismo al espíritu de lucha, militancia y alegría patriótica al que nos convoca la consigna que preside esta Asamblea Nacional: ¡En la calle con la gente, camino a la independencia!

2. Situación económica

En el Informe Político que presentamos en la Segunda Asamblea Nacional del MINH, celebrada el 14 de marzo de 2010, afirmábamos que, "...estamos en presencia del desplome de la estructura económica que ha prevalecido en Puerto Rico durante los últimos 60 años".

Durante los pasados tres años esa situación se ha agravado. La salida de Luis Fortuño y el Partido Nuevo Progresista (PNP) del gobier­no y la victoria electoral de Alejandro García Padilla y el Partido Popular Democrático (PPD), en noviembre de 2012, no ha representado una mejoría de la situación reinante. El gran problema económico de Puer­to Rico no depende de quién administre el ELA, sino del ELA mismo, es decir, del régimen colonial.

Al gobierno García Padilla-PPD no le ha quedado otro remedio que reconocer la precariedad en que se encuentra la economía del País y la ausencia creciente de alternativas para mejorar la situación. Sin embargo, se resisten a admitir el origen estructural del problema e in­tentan mantener una estabilidad precaria a base de nuevos tributos contra el golpeado bolsillo del trabajador, más endeudamiento del Gobierno y la privatización de bienes del Pueblo, siendo el caso más serio la privatización del Aeropuerto Internacional de Isla Verde.

Mientras tanto, se profundiza la recesión que ya dura varios años, se estanca la actividad productiva, se eleva el costo de la vida, la dependencia y se deterioran las condiciones de vida de gran parte de la población.

Fue precisamente el gobierno del PPD el que estimuló el modelo de la mal llamada industrialización del País y el que aprobó la primera Ley de Incentivos Industriales, en el año 1947, cinco años antes de la fun­dación del ELA. Entonces aseguraban que Puerto Rico avanzaría acelera­damente hacia el progreso y la prosperidad, al sustituirse la economía de monoproducción azucarera por la de enclave industrial extranjero. Seis décadas después aquellas promesas se han hecho sal y agua y Puerto Rico se encuentra en una crisis económica y social muy profunda.

Actualmente, apenas cuatro de cada diez personas aptas para trabajar (entre 16 y 65 años de edad) tienen empleo, lo que consti­tuye una de las cifras de participación en la fuerza laboral más bajas de todo el planeta. La economía informal legal e ilegal—sobre todo el nar­cotráfico— las llamadas ayudas gubernamentales y el subempleo han alcanzado una relevancia cada vez mayor ante la ausencia de trabajo asalariado.

Peor aún, en las pasadas dos décadas aproximadamente un millón de personas emigró de Puerto Rico, lo que ha llevado a que el número de boricuas residentes en Estados Unidos supere a los que vivimos en el País. Muchos emigrantes son jóvenes preparados profesionalmente y en plena capacidad productiva, en cuya preparación el Pueblo puertorriqueño ha hecho una gran inversión que beneficia solo a las empresas extranjeras que les contratan sin invertir un centavo.

Un gran reto del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano sigue siendo profundizar, divulgar e implementar una propuesta económica y social, partiendo de la premisa básica de que el futuro en libertad se construye desde el presente colonial y en dirección a la obtención de la independencia plena para decidir nuestro destino. Para ello, nos guiaremos de manera general por los planteamientos contenidos en nuestro documento programático, titulado ¡Con voluntad y es­peranza, otro Puerto Rico es posible!.

3. Situación social

La situación precaria de la economía conduce al empobrecimiento extendido, al endeudamiento público y privado, a la violencia generalizada, al incremento de la corrupción gubernamental y al deterioro de las condiciones generales de vida de gran parte de la po­blación. A esto se añaden serios problemas de contaminación ambiental, destrucción de recursos naturales, ausencia de un plan general de uso de suelos, falta de planificación e insignificancia de la actividad agríco­la, forestal y pesquera.

En febrero de 2013 se cumplieron veinte años de establecerse la llamada política de mano dura por la administración de Pedro Rosselló y el PNP, que continuó bajo las sucesivas administraciones del PPD. Esa visión policiaca, represiva y dirigida a eliminar derechos ciudadanos, fracasó estrepitosamente. En esos veinte años se han asesinado más de quince mil personas. La violencia y la intolerancia, la violencia de género y el discrimen por orientación sexual se han convertido pro­gresiva y peligrosamente en formas "normales" de comportamiento y relaciones sociales.

Se impone la aplicación de una visión salubrista que reconozca el carácter de problema social que presenta la situación de violencia y criminalidad, y que se reconozca el carácter político y económico del comercio ilegal de drogas, que ha convertido a Puerto Rico en ruta prin­cipal entre los países productores y Estados Unidos, donde reside el mayor número de usuarios de esas drogas en el mundo. El MINH ha ofrecido propuestas concretas en relación a un Sistema Universal de Salud y a la medicación del adicto que están contenidas en nuestro documento programático ¡Con voluntad y esperanza, otro Puerto Rico es posible!

Lo que afirmábamos hace tres años y medio hoy tiene mayor pertinencia aún, cuando decíamos que: "Esta grave situación social... podría erosionar las bases materiales...que imposibiliten nuestro de­sarrollo... Ello atenta contra nuestra aspiración de la construcción de un Puerto Rico mejor, en el que prevalezcan la hermandad, el respeto a la naturaleza, el amor al estudio y el trabajo y la salud del cuerpo y el espíritu...urge que prestemos la debida atención a este cuadro social­-natural tan desalentador y destructivo, para que forme parte principal de nuestra agenda de trabajo dentro y fuera de la organización".

4. Línea política del MINH: unidad patriótica y nacional

Reafirmamos aquí la importancia decisiva que tienen la unidad independentista y la unidad nacional para el desarrollo de la lucha por la independencia nacional y la justicia social. Ninguna organización o grupo por sí solo podrá adelantar esta lucha tan desigual y compleja. Las alianzas de la más diversa naturaleza y objetivo son imprescindibles.

Así como pusimos todo nuestro empeño en alcanzar un nivel de acuerdos entre las organizaciones independentistas o anticolonialistas en relación a las elecciones generales de 2012 y antes, en el referén­dum promovido por Fortuño y el PNP para enmendar la constitución del ELA, de esa misma forma continuaremos llevando a la práctica nuestra política de entendidos, alianzas, unidad táctica y acuerdos de diversa naturaleza que contribuyan a adelantar nuestro gran objetivo estratégico. Esta iniciativa permanente la implementaremos con orga­nizaciones políticas independentistas y no independentistas, con gru­pos comunales, ambientales, juveniles y de cualquier otro tipo.

Un paso importante en el proceso de búsqueda de consenso nacional en ruta a la descolonización es el salto de calidad que se va alcanzando, en la discusión sobre la Asamblea Constitucional de Status. Durante el último año ha avanzado en numerosos sectores del País el entendimiento de que ese es un instrumento de gran valor para alcanzar la unidad de propósito de nuestro Pueblo, desde la amplitud y con diversas propuestas e interpretaciones políticas que están ante la con­sideración de la ciudadanía. El debate va siendo cada vez menos sobre si la Asamblea Constitucional de Status es o no pertinente y cada vez más sobre las diversas propuestas presentadas para echarla a andar.

Reconocemos la necesidad urgente de erradicar del movimien­to independentista las actitudes sectarias, arrogantes, autosuficientes o mezquinas. Reconocemos la diversidad de criterios y visiones político-or­ganizativas existentes entre las organizaciones, grupos y personas creyentes en la independencia; así como el valor y la importancia de la acti­vidad que realiza cada cual, dirigida a alcanzar la libertad de nuestra Patria. Sostenemos que las relaciones del movimiento independentis­ta deben estar dirigidas por grandes sentimientos de solidaridad, compañerismo, tolerancia y de una genuina intención de unir voluntades para avanzar. Eso es lo que espera nuestro Pueblo de nosotros y nosotras.

Sabemos que si bien la unidad constituye un principio de nues­tra organización, la implementación de ese principio corresponde a consideraciones tácticas. Muchas veces se trata de acciones coyunturales, que no forman parte de ningún acuerdo estratégico. En otras tantas ocasiones la conciencia sobre la importancia de la unidad para avanzar y triunfar es muy desigual. La unidad puede darse lo mismo a nivel local o municipal, que sectorial, gremial, o nacional, privilegiando en las coincidencias desde cualquier diversidad imaginable. Por eso los procesos unitarios se dan paso a paso, selectivamente, con mucha cau­tela y paciencia. No hay otra forma de hacerlo; pero hay que hacerlo.

Como bien nos recordara el querido compañero Filiberto Ojeda Ríos, el conflicto colonial esencial es entre el pueblo dominado y el dominador extranjero. Como bien planteara Don Pedro Albizu Campos, el triunfo de un puertorriqueño sobre otro puertorriqueño es la derrota de la Patria. Nuestra obligación patriótica es unirnos en todo aquello que nos una, en todo aquello en que coincidamos y adelante nuestro propósito libertario. El gran objetivo debe ser contribuir desde nuestros esfuerzos y capacidades a la construcción de un instrumento poderoso que aglutine todas las fuerzas que afirman la Nación en libertad.

Tenemos una enorme responsabilidad de contribuir a fortalecer la lucha por la independencia nacional y la justicia social y a incrementar la pertinencia de nuestra organización, para que cumpla la responsabilidad histórica en la lucha por la autodeterminación, la des­colonización y la independencia nacional. Este debe ser un asunto de la mayor prioridad para la nueva Dirección Nacional que resulte electa en esta Asamblea Nacional.

5. Trabajo internacional

Nuestra organización ha continuado desarrollando un intenso trabajo internacional, en el Foro de Sao Paulo, en el Comité de Des­colonización de la ONU, en el Movimiento de Países No Alineados y en otros escenarios internacionales, donde han participado delegados del MINH y de la Juventud Hostosiana (JH). Igualmente mantenemos relaciones bilaterales con partidos y gobiernos amigos, sobre todo del Caribe y América Latina.

La Misión de Puerto Rico en Cuba sigue realizando una importante labor en el desarrollo de la solidaridad internacional con nuestra causa y de igual forma es un centro de solidaridad con otras luchas hermanas.

Participamos destacadamente en el reclamo internacio­nal por la liberación del compañero Oscar López Rivera; llevamos este reclamo a diversos puntos del planeta para crear consciencia sobre la justeza de esta demanda.

Durante los pasados años delegaciones del MINH sostuvieron encuentros con importantes dirigentes de la región, entre estos el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro—desde que ostentaba el cargo de canciller— el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega y altos dirigentes de los gobiernos de Ecuador, Cuba y Bolivia. Visitamos y par­ticipamos en eventos celebrados en El Salvador, Honduras, México, Venezuela, Nicaragua, Ecuador, Bolivia, Brasil, San Vicente, Guadalupe, Estados Unidos, Uruguay, Irán, Egipto, Malasia y otros países.

Igualmente, delegaciones del MINH participaron activa e intensamente en numerosas reuniones y diversas actividades en la Or­ganización de Naciones Unidas, tarea en la que se ha distinguido de manera excepcional la compañera Olga Sanabria y en la que ha par­ticipado la organización hermana Comité de Puerto Rico en la ONU (COPRONU).

La Juventud Hostosiana avanzó significativamente en el desarrollo de relaciones bilaterales con las juventudes de distintas organizaciones fraternas, en Nicaragua, Cuba, Venezuela, Ecuador y otros países.

Significativamente, logramos producir un consenso entre las di­versas organizaciones independentistas sobre la inclusión del tema de la Asamblea Constitucional de Status como instrumento descoloniza­dor, en el contenido de la resolución aprobada reiteradamente por el Comité de Descolonización de la ONU.

Uno de los logros más importantes—a cuyo cumplimiento de­dicamos muchas energías— fue la inclusión del tema de Puerto Rico en la Declaración Final de la reunión cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), celebrada en Santiago de Chile, en 2013. El desarrollo de esta importante organización latinoamericana y caribeña ha estado inspirada por grandes dirigentes de la región, en­tre los que destaca el Comandante Hugo Chávez Frías, presidente hasta su muerte de la República Bolivariana de Venezuela, internacionalista ejemplar y amigo activo y militante de la independencia de Puerto Rico, a quien recordamos hoy con profundo aprecio y respeto.

La latinoamericanización del caso colonial de Puerto Rico ha sido de nuestros objetivos más importantes. La solidaridad que hemos recibido de Venezuela Bolivariana, de Cuba Socialista, de Nicaragua Sandinista, de Bolivia, de Ecuador y de otros países de la región, ha marcado la diferencia. Definitivamente, ya no estamos solos en Nues­tra América.

6. Política organizativa del MINH

Ha sido complejo el proceso de construir nuestra organización política en circunstancias muchas veces adversas, con grandes dificul­tades y limitaciones económicas y materiales, con recursos escasos, e incluso con un nivel de ineficacia, aunque nuestra membresía se dis­tingue invariablemente por poseer una gran voluntad y compromiso patriótico.

En esta etapa de lucha reconocemos la necesidad imperiosa de fortalecer internamente al MINH, de elevar cualitativamente los aspec­tos de organización, formación política, eficacia y movilidad.

Somos conscientes, igualmente, de que nos corresponde la res­ponsabilidad de ir formando una generación de relevo, no solo para nuestra organización, sino para la lucha de independencia en general. En ese sentido, podemos afirmar con satisfacción que aquel proyecto que se llamó Juventud Hostosiana es hoy una realidad. El desarrollo y fortalecimiento de la Juventud Hostosiana ha sido uno de los más im­portantes logros político-organizativos del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano en los pasados años. Muchos de estos valiosos jóvenes nos acompañan aquí hoy y nos llena de satisfacción que un número significativo de ellos y ellas son candidatos a formar parte de la nueva Dirección Nacional que ha de ser electa la tarde de hoy.

Esta renovación generacional debe ir acompañada por una conti­nua renovación ideológica. El MINH ha de ser tanto una organización de personas jóvenes como una organización de ideas jóvenes, cargadas de energía, de denuncias, de propuestas y de iniciativas de toda naturaleza.

Tenemos la responsabilidad permanente de promover la causa de la independencia nacional y la justicia social, su posibilidad, su per­tinencia, conveniencia y deseabilidad, superando el discurso negativo y proponiendo en cada ocasión alternativas positivas para el desarrollo de un País mejor.

Entre los objetivos que debemos ir fortaleciendo y desarrollando se encuentran los siguientes:

1. Consolidar las finanzas de la organización.

2. Elevar el nivel del apoyo al movimiento obrero en sus luchas económicas y sociales.

3. Aumentar la participación en las luchas que libra el pueblo puerto­rriqueño residente en Estados Unidos.

4. Asegurar la continua participación de nuestra organización junto a nuestro Pueblo en la búsqueda de soluciones a sus problemas in­mediatos, económicos, sociales, de seguridad y de todo tipo.

5. insertar nuestra militancia en las luchas que libran nuestras comu­nidades en favor de la justicia social y una calidad de vida superior. Las luchas sociales son luchas políticas que en la medida en que promueven y adelantan el apoderamiento y la autogestión comu­nitaria, son procesos que contribuyen a la descolonización e inde­pendencia nacional. Son luchas que trascienden consideraciones estrictamente legales o jurídicas, que posibilitan el desarrollo de importantes alianzas y que tienen que ver con la vida cotidiana de la ciudadanía. Las luchas sociales que en estos momentos se dan de forma inconexa y desarticulada, por sustituir la dañina depen­dencia en favor de la autogestión comunitaria, por la democracia participativa, por la conservación de las tierras agrícolas y la sobe­ranía alimentaria, por defender el ambiente, por una revolución en el sistema educativo y de salud, y por otros derechos humanos fundamentales, son solo algunos escenarios donde los hostosianos debemos integrarnos para luchar, hombro con hombro, con el ac­tor principal de esas luchas: el Pueblo.

6. Generar una participación destacada en el debate público sobre la Asamblea Constitucional de Status, contribuyendo a despejar visiones demagógicas o confusas sobre un asunto relevante como éste, en cuyo desarrollo hemos estado presentes siempre.

7. Elevar nuestra participación en las luchas y actividades diversas que fortalecen y contribuyen a la defensa y al desarrollo de la cultura puertorriqueña. Asimismo, reanudar la publicación de libros de di­verso contenido político y social, y otras publicaciones del MINH y la programación de actividades culturales de diverso tipo.

8. Desarrollar campañas de educación al Pueblo sobre la deseabilidad y conveniencia de la independencia nacional y análisis de los principales problemas que nos aquejan y soluciones posibles a los mismos y sobre los derechos civiles y humanos que nos amparan.

9. Considerar la reconceptualización de nuestra política organizativa, en función de los planteamientos político-organizativos que esta organización ha ido considerando durante los pasados años, para elevar la calidad y la eficiencia de nuestro trabajo patriótico.

7. Balance

Hace tres años y medio afirmábamos lo siguiente: "Los siguientes tres años de la administración Fortuño-PNP anticipan un clima de con­frontación continua, de iniciativas perversas en contra de la clase traba­jadora, de las comunidades, de los pobres, de nuestra cultura y nuestra nacionalidad, de la implantación de estrategias anexionistas y asimilistas en todas las áreas de nuestra sociedad y de entrega a los grandes inte­reses económicos. Corresponde, como lo hemos ido haciendo desde el 2009, contribuir activamente y con un amplio espíritu unitario, a for­talecer la resistencia y la denuncia, elevar la conciencia de nuestro Pue­blo, generar propuestas e ir articulando las estructuras políticas y socia­les que permitan enfrentar con éxito a los enemigos de la Patria.

A esos tenemos que denunciarlos incesantemente, deslegitimarlos como falsos representantes del País que son, como aliados in­condicionales y sumisos del colonialismo y el anexionismo, como ene­migos del ambiente, de las comunidades, de los trabajadores, de la cultura y de la dignidad nacional.

Es tarea de todos los días cuestionar, impugnar, criticar y denunciar continua e incesantemente. Que no tengan un instante para prevalecer, para generar falsas concordias o acomodos momentáneos. Que se sepan acechados por un pueblo que no está dispuesto a sopor­tar abusos."

Cumplimos ese objetivo junto a muchos otros sectores de nues­tra sociedad. Por eso fueron derrotados en las elecciones generales de 2012, aun cuando el beneficiario electoral fue el colonial Partido Popu­lar Democrático.

Superamos múltiples y diversas dificultades y limitaciones que imponen la colonia y las condiciones de vida prevalecientes, y con una extraordinaria voluntad, patriotismo y responsabilidad social, el Movi­miento Independentista Nacional Hostosiano —sus dirigentes, su militancia y los miles de simpatizantes y seguidores de esta organización— puede llegar a esta Tercera Asamblea Nacional Ordinaria a informar sobre algunas de las numerosas tareas realizadas durante los pasados tres años. Tareas de cuyo cumplimiento nos sentimos orgullosos y orgullosas, que nos impulsan a continuar sirviendo a Puerto Rico con el mismo amor y compromiso y que nos permiten celebrar la pertinencia de nuestra organización, de nuestro esfuerzo patriótico a favor de la independencia nacional y la justicia social. Son las siguientes:

1. Participación en las elecciones generales de 2012, con el respal­do a candidatos y candidatas de varias organizaciones y llevando candidatos miembros del MINH, particularmente la candidatura del compañero José Rivera Santana a la Cámara por el Movimiento Unión Soberanista (MUS);

2. Participación en el referéndum de enmiendas constitucionales en 2012;

3. gran esfuerzo para alcanzar la inclusión del caso colonial de Puerto Rico en la CELAC;

4. aprobación del importante documento ¡Con voluntad y esperanza, otro Puerto Rico es posible!, programa de lucha del MINH;

5. fortalecimiento extraordinario de la Juventud Hostosiana;

6. continuidad de la publicación del periódico El Hostosiano y pro­ducción de varios programas de radio y boletines;

7. realización de múltiples esfuerzos unitarios, electorales, ambienta­les, comunales, educativos, de salud y otros;

8. participación en la mesa de diálogo del Plan Decenal de Educación; a través del grupo conocido como Educadores Hostosianos;

9. coauspicio del Proyecto de la Cámara 1185, para estudiar la viabili­dad de un sistema universal de salud para el País;

10. celebración de numerosas actividades de educación política, de­nominadas Viernes Hostosiano, en San Juan, Mayagüez, Caguas, Trujillo Alto, Aguadilla y Arecibo;

11. participación destacada en la lucha contra el gasoducto del norte, en la que se distinguieron los compañeros Juan Camacho, en Toa Baja, Gustavo Casalduc, en Utuado y Ernesto Vélez, en Manatí;

12. participación destacada en la lucha contra la instalación de un in­cinerador en Arecibo, con la participación de los compañeros Iván Elías, Marta Quiñones y otros;

13. desarrollo del Instituto Hostosiano de Educación Política (INHEP);

14. participación anual exitosa del kiosco del MINH en los festivales del periódico Claridad.

15. publicación, desde hace dos años, de una columna semanal en el periódico de Venezuela Bolivariana, El Correo del Orinoco, diario que se publica tanto en papel como en el espacio cibernético;

16. presencia mediática nacional permanente, a pesar de la creciente censura, gracias principalmente al esfuerzo de los compañeros y compañeras de la Comisión de comunicación social del MINH;

17. intensa presencia internacional a través de los medios cibernéticos, gracias sobre todo a la iniciativa y el esfuerzo de la compañera Vil­ma Soto Bermúdez y colaboradores. RedBetances, creada hace más de 15 años, ha tenido a septiembre de 2013, sobre un millón entra­das. La página MINH Puerto Rico, por su parte, creada en el 2010, tenía al 8 de septiembre pasado 570,185 entradas. Son visitantes de todo el mundo que reciben información sobre nuestra lucha a través de nuestras páginas, desde Estados Unidos hasta Ucrania, Europa, Australia y América Latina y el Caribe. La página de videos de minhpuertorico en Dailymotion ha tenido 134,438 entradas;

18. desarrollo del proyecto Iniciativa de Bienestar y Salud Comunitaria Dr. Ramón Emeterio Betances, con sede en los bajos del local del MINH en la comunidad de Puerto Nuevo, con la participación des­tacada de la compañera enfermera Eugenia Pérez Montijo, el Dr. Eduardo Rivera y el trabajador social Joel Vázquez;

19. gran esfuerzo por mantener y desarrollar las finanzas del MINH, tan necesarias al desenvolvimiento de toda nuestra lucha, por medio de una diversidad de actividades e iniciativas, en cuyo esfuerzo se han distinguido los compañeros Carmen Borges, Néstor Nazario y Judith Morales;

20. participación destacada en el esfuerzo unitario denominado Mesa de Lares;

21. participación activa en la campaña por la excarcelación del querido compañero Oscar López Rivera y de los Cinco cubanos antiterroris­tas presos en Estados Unidos.

Nos encontramos en una coyuntura a la vez compleja y esperanzadora. Tenemos ante nosotros una gran oportunidad de incidir en la vida del País, haciendo la denuncia certera de la naturaleza real de los profundos problemas que nos aquejan y ofreciendo ideas y alter­nativas sensatas y razonables, para mejorar las condiciones de vida de nuestra gente y avanzar en la ruta de la autodeterminación, la indepen­dencia y la justicia social.

Debemos prestar atención especial a los graves problemas de seguridad pública que sufre nuestro Pueblo, al insoportable clima de violencia generalizada que tiene un profundo origen social y que el Go­bierno pretende reducir a un problema de carácter policiaco o puni­tivo. Nuestro Pueblo demanda una mejor calidad de vida, digna, en paz, para lo cual hay que luchar denodadamente.

Igualmente, nuestras mayores preocupaciones deben ir dirigi­das a enfrentar junto a nuestro Pueblo el serio problema en el campo de la salud, que va de mal en peor, mientras unos pocos se enriquecen a costa de la vida misma de la población. La lucha a favor de un siste­ma universal de salud junto a otros sectores de nuestra sociedad debe mantenerse hasta alcanzar ese objetivo. Ese es, sin duda, un asunto de vida o muerte.

La educación es un asunto de primera importancia para los hostosianos. El sistema de educación pública de nuestro País requiere pro­fundas transformaciones, para que pueda servir efectivamente a nuestra sociedad. La creación del grupo amplio denominado Educadores Hostosianos deberá ser solo un primer paso en el esfuerzo de nuestra organi­zación en aportar a mejorar significativamente la situación del sistema educativo que afecta a cientos de miles de nuestros ciudadanos.

Debemos esforzarnos por lograr que avance decisivamente la Asamblea Constitucional de Status como instrumento genuinamente descolonizador, sobre la base de los principios soberanos, participativos y democráticos que hemos sustentado por mucho tiempo. Esta es ya una coyuntura importante en esa dirección, a la que hay que im­primirle esfuerzo, análisis e interpretación y profundidad ideológica y política, garantizando que sirva a los intereses del Pueblo y no de ningún partido o grupo en particular.

Nuestros esfuerzos deben estar dirigidos al desarrollo de una economía sustentable, de la cual la agricultura sea una columna princi­pal. Debemos respaldar con entusiasmo a los agricultores del País, así como la defensa de nuestras tierras cultivables y la agricultura como fuente de alimentación y trabajo.

Ello, junto con una elevación de nuestra participación en la lu­cha en las comunidades, en el movimiento obrero, en las luchas am­bientales y por derechos ciudadanos, así como a favor de la unidad patriótica y nacional, puede sentar las bases para un salto de calidad y cantidad de la lucha por la independencia nacional y la justicia social. Para dar forma y solidez a los esfuerzos en relación a estos asuntos que debemos atender de inmediato, nuestro documento programático, ¡Con voluntad y esperanza, otro Puerto Rico es posible!, nos ofrece un conjunto de ideas, alternativas y propuestas que debemos implantar y enriquecer en la práctica cotidiana.

En la calle con la gente, caminemos hacia la independencia na­cional y la justicia social, con entusiasmo y confianza en el porvenir, orgullosos y orgullosas de que estamos sirviendo a Nuestra Patria, a nuestro Pueblo, a nuestra Nación.

¡Viva la Tercera Asamblea Nacional del Movimiento Independentista Nacional Hostosiano!

¡Viva Puerto Rico Libre!


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